¿Cuál es tu papel como adulto en el juego del niño?
Ser padres es una tarea difícil para lo que no se nace sabiendo. En los últimos años se está dando mucha importancia a la formación de padres para resolver dudas, cuestiones, y problemas que surjan en su tarea de educadores.
El padre, madre o educador conoce al niño, sus características, sus necesidades y su desarrollo educativo, por tanto es también consciente de la necesidad de fomentar el juego y más aún utilizarlo como metodología de aprendizaje.
El adulto tiene el papel de mediador entre el juego y el desarrollo del niño, y la función como profesional si es educador, utilizando estrategias variadas y originales para promover el juego creativo, e intervenir en los diferentes momentos del juego de los niños.
Algunos padres, queriendo ser compañeros de juego de los niños, llevan la dirección del juego y coartan la iniciativa del niño, otros, no juegan o no saben como jugar o tienen la falsa creencia de que jugar por jugar es una pérdida de tiempo, ya que para ellos no hay contenidos que intervengan en el desarrollo de la mayor cantidad de facultades intelectuales.
Muchos padres se olvidan de la tarea fundamental con el niño: dejarle jugar libremente y posibilitar las actividades lúdicas.
He aquí una pequeña guía para que el adulto juegue con el niño:
* Que el niño guíe: Que nos diga en que consiste el juego, qué es lo que va a hacer y que nos dé un papel concreto para jugar.
* El juego no es una tarea: Pongamos especial atención para no transformar el juego en ejercicio o en tareas que se propongan unos determinados aprendizajes.
* No es necesaria la estimulación constante: El niño no tiene porque estar siempre activo, también necesita momentos de inactividad, de soledad.
* La importancia del tiempo: Necesitamos tiempo para jugar con el niño sin pensar en otras cosas y sin prisas.
* El respeto: Tengamos en cuenta las preferencias de los niños, sin limitarse exclusivamente a ellas, pero si respetándolas y favoreciéndolas.
* Es una actividad agradable: Disfrutemos el tiempo de estar juntos.
Recuerda que el niño que juega con sus padres y seres queridos se siente atendido, cuidado y apreciado. Todo ello proporciona al niño la seguridad y confianza necesarias para su desarrollo integral. Así pues, cuando el adulto desee compartir el juego con el niño, no tiene más que dejarse guiar por él, dejar que el niño nos ofrezca un objeto, nos diga lo que tenemos que hacer, nos guíe en lo que va a pasar y nos de un papel concreto para jugar.
El adulto puede también, de manera ocasional, tomar la iniciativa de proponer al niño actividades apropiadas para su edad.
TIP:
¿ Que juegos te gustaban de los 0 a los 3 años? Pregunta a tus familiares y al igual puedes jugar los mismos con tu niño.
Referencia:
http://www.terapia-cognitiva.mx/wp-content/uploads/2015/11/juego-y-desarrollo-del-juego.pdf