Imaginería Guiada
Es importante que cuando tienes estrés o miedo, sitúes el área del cerebro que se afecta, en este caso los ganglios basales en un nivel relajado y sano. Para ello lo mejor es seguir un régimen de relajación diario. Dedicar entre veinte y treinta minutos al día para practicar la relajación corporal te producirá muchos beneficios, entre ellos disminuir la ansiedad, bajar la presión sanguínea, aliviar el dolor muscular y evitar el mal genio ante los demás.
La imaginería guiada es una magnifica técnica que se puede emplear a diario.
Instrucciones:
Busca un lugar en donde puedas aislarte veinte o treinta minutos todos los días. Siéntate en una silla cómoda (o, si no te vas a quedar dormido, túmbate en el suelo) y ejercita la mente para tranquilizarse. Con los ojos de la mente, dibújate tu propio remanso. A mis pacientes les pregunto. " Si pudieras ir al lugar que quisieras del mundo para relajarte y sentirte a gusto ¿Dónde irías? " Imagina tu sitio especial con los cinco sentidos. Ve lo que quieras ver; oye los sonidos que te encante oír, huele las fragancias del aire, deléitate con todos los sabores y siente lo que quieras sentir. Cuanto más viva sea la imaginación, mejor podrás abandonarte en esa imagen. Si irrumpen pensamientos negativos, tenlos en cuenta pero no te detengas en ellos. Concéntrate de nuevo en la seguridad y placer de tu remanso. Respira hondo, despacio y con calma. Disfruta de tus minivacaciones.
Referencia:
Amen, D. Cambia tu Cerebro Cambia tu Vida. Sirio. España. 2015.
